sábado, 11 de octubre de 2008

Mugre


¿Qué lugares son aquéllos a los que me he dejado llevar?. El impacto que producen algunas palabras son para toda la vida. En especial si aquéllas provienen de quien uno ha tomado como modelo para poder armarse, para poder hacerse, para Ser. Y si tus palabras hacia mí siempre fueron las más abominables es porque en verdad tenías el inmundo anhelo de dejar en esta tierra una semilla que prolongara tu existencia, que fuese yo una extensión de tu irreverente vida, una versión nueva de esos episodios que marcaron en tu historia el quehacer de tus chancherías. Tus faltas, ahora son mis faltas. Tus deudas, ahora son mis deudas; y yo, atrapado en esa imagen tuya que al fin y al cabo tanto odié, asomo mi razón cauteloso, temeroso de dar un paso en falso y sentir el estallar de mi alma, incapacitado de poder liberarme de esa celda odiosa de palabras a la que me has atado por el resto de mi existencia.

No hay comentarios: